Este post se basa en la discusión que generó mi opinión sobre eventos cerrados y el Día Mundial de la Arquitectura de Información en Bogotá. Particularmente le responderé a Natalia Vivas autora de Por qué asistiré al Día Mundial de la Arquitectura de Información en Bogotá. Cuidado: Es mi postura frente a las ideas, independientemente de las personas.
¿Por qué escribí el post sobre eventos cerrados? Porque he trabajado en bibliotecas digitales y he visto que se necesitan infraestructuras de información sostenibles. ¿Podría llamarse arquitectura de información sostenible? No lo sé, es lo primero que se me ocurre mientras escribo esto. El problema se da cuando se realizan documentos que únicamente pueden ser consultados bajo condiciones específicas. En el caso de la biblioteca digital la restricción se da por derechos de autor: Si no tienes permisos para que el documento se pueda publicar, no puedes ponerlo a disposición de tus usuarios. En ese caso ¿Para qué trabajar en algo que después no vas a poder usar?
Igual pasa con los eventos cerrados. Su primer argumento es que el Día de la Usabilidad publicó las memorias de su versión 2010 y 2011 en el Slideshare de Usarte. Como usuario no encontré las memorias del evento del 2011 y puedo ejemplificar aquí perfectamente a lo que me refiero con infraestructuras de información cerradas: ¿Dónde puedo encontrar la presentación de Angelo Laverde realizada en el evento de 2010? Ojalá que cualquiera (que no sea Angelo, por supuesto) encuentre en el sitio del Día de la Usabilidad o en su Slideshare dicha presentación. Cuidado, porque el evento en 2010, de donde salió esta presentación fue gratuito, pero eso no quiere decir que sea libre. Mi comentario de infraestructuras cerradas apunta a que además de poder obtener las cosas gratuitas en lo posible, si es imprescindible que las cosas puedan remezclarse y se puedan realizar obras derivadas a partir de estos trabajos. En caso de conseguir la presentación del señor Laverde ¿podría modificarla para hacer una presentación mía, basada en la suya?
El segundo argumento que encuentro es que no sé nada de logística. Que ellos, a diferencia mía, si han organizado eventos y no tengo ni idea de lo duro que es organizar un evento. Tienen toda la razón. Yo no soy un buen logístico y organizar eventos no es algo que me apetezca. En lo que si trabajo es en la creación de infraestructuras de información y en mi escrito revelo mi preocupación porque estas infraestructuras pueden convertirse en espacios no inclusivos. Como ella misma dice: «Aunque siendo fieles al principio de usabilidad: la próxima vez será mejor «prevenir un error que recuperarse de él«.» Si mi escrito puede servir para prevenir algo del evento que aún no se ha realizado ¿Mejor que mejor o no? Mi presencia o ausencia no marcará una gran diferencia, pero si anoto que puede marcar la diferencia para los de mi tipo, aquellos que por ésta u otras razones no asistirán al evento.
Recuerdo haber leído una primera versión de este texto, que al parecer fue editado con el tiempo, donde me llamaba «Diego Ramírez», invitaba al evento el 11 de febrero (en vez del 10, cuando se realizará) y donde mencionaba que en el 2005 eran 15 personas las únicas que se reunían para discutir de este tema. Me alegra mucho que se puedan corregir estas imprecisiones, no importan estos errores, pero aún se mantiene su afirmación de «pasamos de 15 personas en 2005 a 320 asistentes en 2011» donde continúa afirmando que únicamente 15 personas en 2005 trabajaban estos temas. Si la Universidad Javeriana tiene un área completa de arquitectura de información (que consta más o menos de 8 asignaturas relacionadas con el tema, donde ves una cada semestre casi que hasta graduarte) que estaba en funcionamiento incluso en el 2005 ¿No se están legitimando argumentos basados en la deslegitimación de otros? Cierra su argumento con la frase «Colombia cuenta con la fortuna de tener sólidas comunidades entorno a temas tecnológicos, pero no todas podemos funcionar igual.«. ¡Exacto! No todos se inscribieron en esta universidad o en cualquier otra que brindara espacios de participación y discusión sobre el tema. ¿El evento en cuestión apunta a institucionalizarse de la misma manera que una universidad? ¿Qué pasa con los 15 del 2011 que discuten el tema pero no les interesa asistir al evento? Como dice Andrés Lara «Mi opinión sobre eso es que en un país que apenas está creciendo en estos temas debería ser gratuito todas las conferencias». Tal vez la solución esté en crear microeventos más baratos e inclusivos que en buscar patrocinadores para cubrir tiquetes de avión, carpetas, esferos y demás.
Tal vez mi evento soñado sea como el Learning, Freedom & the Web que a propósito incluyen un manual sobre cómo realizar tu propio festival. En este documento hablan del aprender haciendo. No incluir en el evento conferencistas magistrales, sino agrupar a un equipo humano que desarrolle un proyecto. Cito nuevamente a Natalia: «somos MUY pocos los que nos dedicamos a esta disciplina formalmente, pero donde son MUCHÍSIMOS los que están interesados en aprender.» y más adelante menciona algo «(…)de la crítica constructiva y del «yo participo»«. Con este tipo de eventos, como el de Mozilla empiezo a cuestionarme: ¿Qué nivel de participación se puede dar en un auditorio donde los participantes se dedican a recebir información? Si las buenas cifras de Natalia se mantienen (15 en 2005 – 320 en 2011) la ronda de preguntas al final de cada presentación va a dejar a mucha más gente con menos oportunidades y tiempo de participar. Sólo sueño un poco: ¿y si en el evento trabajáramos un proyecto entre todos y uno de los participantes es Louis Rosenfeld (El del libro del oso polar) no sería genial? No alcanzo a imaginarme cómo sería su organización, pero es algo que me gustaría explorar.
A modo de conclusión
Me encantó que este tema hubiera generado debate dentro y fuera de internet. Ojalá pueda discutirse en el evento del 10 de febrero de 2012 en Bogotá. Ojalá quienes asistan nos puedan contar a los que no vamos las conclusiones que sacaron allí y si se generó algún espacio de discusión público, por ejemplo en internet para que de paso quede documentado, para hablar del tema.
Pido disculpas si en algún momento pude sonar grosero. Mi intención no es hacer crítica destructiva y por eso he contestado a todos los comentarios que han salido de diferentes lugares. Me duele que esta discusión se haya tomado a modo personal y en ciertos momentos me ofende haber recibido correos hirientes. Creo que la mejor solución para eso es la discusión abierta.
Agradezco a quienes se tomaron el tiempo de comentar, discutir y difundir esto. Sobre todo gracias a Héctor y Natalia por organizar este evento. Sin su iniciativa la discusión sería mucho más incipiente. Aprovecho para agradecer a Angelo Laverde por lo mucho que aprendí de él, trabajando a su lado como arquitecto de información. Los tres son excelentes personas y admiro sus trabajos. Discrepo de algunas cosas, pero es una mera discusión profesional, nada tiene que ver con ellos como personas.
Propongo que como el evento no se ha realizado aún se incluyan algunas discusiones sobre este tema y otro que se me ocurre: Profesionalización de la arquitectura de información. Si bien una parte de mi trabajo incluye arquitectura de información, soy un profesional en ciencia de la información. Hay algunas diferencias, pero esta discusión deberá darse en otro espacio.
No confundir lo libre con lo gratis. También recibí críticas diciendo que sólo asistía a eventos gratuitos. Andrés Lara realizará un evento en Popayán. Tuve la fortuna de ser invitado y aunque no pague los $25.000 COP del día de la arquitectura de información en Bogotá, con gusto pagaré los gastos del viaje para estar en Popayán. No es cuestión de dinero, es cuestión de libertad.
Espero no ser radical con el tema de la cultura libre, pero como dice Natalia: Hace falta una cultura del «yo participo». En este caso participo de la cultura libre.
Me viene a la mente la respuesta de @xpectro ante la pregunta de uno de los asistentes al excelente taller de cómic y novela gráfica que se está dictando por éstos días en la Biblioteca Pública Julio Mario Santo Domingo. En medio de una discusión preámbulo al inicio del taller, de manera algo desafiante (muy común en los rockeros, como el usuario al que hago mención), le preguntó algo como: «si usted es contradictor de SOPA, del cierre de Megaupload, y de los modelos cerrados, ¿por qué trabaja para Adobe, Apple o Mintics, siendo ellos defensores de la cultura cerrada?. Resumiendo, Pablo argumentó y demostró con hechos cómo desde dentro de los modelos cerrados era posible, si bien no convertirlos en abiertos, al menos lograr persuadir a los empresarios de las fallas en sus estrategias y modelos de mercadeo. Como ejemplo resaltó que gracias a su aporte (un simple comentario en una mesa de trabajo), la suite de Adobe bajará sustancialmente de precio en el futuro. No será el ideal para muchos, pero es un primer paso. Ahora bien, desde mi punto de vista, considero que los dos modelos son necesarios y se puede convivir (tal vez lo necesitamos) con ambos. El problema no es el precio, si no que se cobre lo justo (como muchas de las aplicaciones iOS que usamos muchos de nosotros para producir contenidos y relacionarnos a diario). Para el caso del «polémico» evento, creo que se está cobrando lo justo. En cuanto a los contenidos, comparto la iniciativa de que sean compartidos y se permita su uso como parte de nuevos trabajos, pero hay maneras mucho mas cordiales y viables de proponerlo. Finalmente, y a manera de reflexión, opino que si muchos de los participantes de la cultura abierta dejaran de ser tan «cerrados» a la cultura cerrada, el concepto de «abierto» tomaría un poco mas de lógica. Lástima que una discusión tan interesante haya tomado un sabor a contienda religiosa.
Hola Camilo.
Entiendo tu punto: La idea es cambiar las cosas desde adentro. Yo decidí no asistir y discutir el tema por la web. En realidad no me apetecía asistir al evento.
Sobre las aplicaciones iOS que mencionas: Mis comentarios apuntan a tener derecho a modificar las cosas que usas. Aunque te den las cosas gratis por iTunes, no siempre tienes la capacidad de modificaras. Si pagas, la cosa es mucho peor: Es como si compraras un carro con la condición que nunca podrás destaparlo.
Sobre las maneras cordiales. Creo que he sido muy respetuoso. Lo único que hice fue abrir una discusión en mi blog. Igual, si no he sido cordial pido disculpas. Espero ser mucho más amable. Simplemente planteo mis argumentos, si alguien tiene mejores que los discuta y entonces desbaratará los míos. Si no hay diálogos, creo que no hay construcción.
No comparto tu opinión sobre lo de «contienda religiosa». Consdero que he estado muy abierto a las críticas y opiniones. De hecho mi percepción del primer post al segundo sobre el evento se ha modificado por las discusiones que tuvimos. Lo religioso me suena a lucha entre sordos y creo que aquí no se ha dado, al menos de mi parte.
De nuevo gracias por tomarte el tiempo de comentar. A mi me ha resoltado enórmemente provechoso escuchar otras opiniones.
Por cierto ¿fuiste al evento?
¡Un abrazo!